Puede que esta artística casa sea pequeña en tamaño (¡no llega ni siquiera a los 56 metros cuadrados!), pero tiene muchísima personalidad y un potencial enorme. Fue construida a partir de un kit de la Tumbleweed Tiny House Company, que vende planes para construir casas diminutas, y todas tienen menos de 84 metros cuadrados. Son acogedoras, con un diseño inteligente y los compradores pueden aprovechar enormemente estos dinámicos espacios.
Mientras que la distribución es realmente moderna, basada en las creaciones del movimiento de las casas diminutas, las características de la casa son un mirada a un momento más clásico. Esto se hace evidente en los techos y paredes de planchas de madera pintadas de blanco, en las vigas de madera natural o en la elección de colores.
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Los luminosos armarios blancos tienen frontales de vidrio, que permiten echar una ojeada a los contenidos sin hacer que estos sean completamente visibles. Una pequeña isla proporciona un poco de separación entre la cocina y el resto del espacio, y los colores se combinan a la perfección con los del techo.
Con menos de 56 metros cuadrados, los diseñadores han logrado colocar un lavaplatos y unos estantes abiertos en la cocina. Hay también espacio de sobra bajo las encimeras.
En esta imagen pueden verse la chimenea y la sala de estar, ademas del desván-dormitorio en la planta de arriba. Se puede acceder al dormitorio con una escalera de mano pero hay que tener un alma aventurera para dormir ahí arriba.
El vestidor de esta casa diminuta es una joya.
Esta adorable casa incluye también un solarium.
La parte trasera de la casa es tan agradable como la fachada. Hay un pequeño patio con mesas y sillas, que es perfecto para tomar el té.
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