En las afueras de Seattle, Washington, hay una pequeña comunidad de casas diminutas, que es el sueño de cualquier amante de la vida de suburbio. Las casas de campo de Greenwood Avenue, a 15 kilómetros del centro de Seattle, son el hogar perfecto para alguien que quiere vivir una vida tranquila y verde sin alejarse mucho de la civilización. Entre las ocho casas que conforman la comunidad, Sundown Cottage es una de las más bonitas y luminosas, un ejemplar estelar tanto en su diseño exterior como interior.
Aunque la casa, puesta en venta recientemente, fue vendida a una familia afortunada este mes, según la página de Facebook de The Cottage Company, nada impide que hagamos una pequeña visita virtual de la preciosa Sundown – el nuevo nombre de la casa, ya que es tradición para esta compañía "vecindario de bolsillo" que los dueños den un nombre a sus casas.
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Aunque el frondoso jardín de la casa necesita un poco de mantenimiento, proporciona una exuberante y colorida apariencia que inmediatamente ayuda a cualquier invitado a sentirse a gusto en un entorno natural y armonioso.
El porche delantero tiene una puerta de dos paneles que permite que se filtre la luz y el aire mientras evita que mascotas y niños traviesos se escapen. Además, el nombre de la denominada casa esta tallado en un cartel cerca de la puerta, marcando su identidad con orgullo.
El porche también tiene un área para sentarse, que se completa con una mesa de café y cojines para disfrutar del sol y de la vegetación.
El amplio salón presenta un elemento único y potencialmente uno de los más originales de esta casa: una estantería que también sirve de entrada al comedor gracias al uso de un vigoroso arco. Los amplios estantes permiten tanto almacenar como colocar elementos decorativos, mientras enmarcan el cuartel general de las comidas.
En un espacio relativamente pequeño, los paneles de madera del comedor y sus vistas de los jardines vecinos ayudan a darle un acogedor ambiente de campo.
En esta cocina, todo el espacio esta aprovechado de manera inteligente, siendo cómoda y con un sencillo encanto gracias a sus colores cálidos aunque equilibrados.
Aunque el nombre de la casa es Sundown (anochecer), su verdadero esplendor reposa en la gran cantidad de luz que entra por sus muchas ventanas, dejando pocas zonas sin iluminar.
La casa tiene tres dormitorios, uno de los cuales puede convertirse con facilidad en una oficina o una zona de juegos, si fuera necesario.
En la planta baja también hay una sala diáfana que puede usarse como una pequeña oficina o como un vestidor. Colocando el espejo encima del escritorio, este puede convertirse en un estupendo tocador.
El dormitorio del piso de abajo es más básico y es un cuarto de invitados maravilloso si prefieren quedarse con las magníficas vistas sólo para ustedes. No les culparemos.
Como ventaja ecológica, la preciosa casa esta equipada con una instalación fotovoltaica de 2.2 KW y el garaje y el sótano completan todas las prestaciones que puedan necesitar en esta esplendida vivienda.
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